Las funciones que se adjudican a la educación surgen desde variados tópicos y posturas intelectuales. En tal sentido es posible advertir que los docentes ocupan funciones diversas dada la naturaleza de su quehacer.
Un buen docente tendrá un papel fundamental en el desarrollo de sus alumnos, desde el punto de vista intelectual, como personal. Por lo demás nuestra meta como futuros educadores es responder a la exigencias educacionales de nuestros alumnos, entregándoles una educación de calidad, para lo que también es necesario ser mejores profesores, e ir superándonos cada día.
Así, las características que debe poseer un buen profesor podrían agruparse en diferentes tópicos:
En lo personal:
1. Tener vocación: ayuda a sus estudiantes a crecer personal y profesionalmente, ama lo que hace por sobretodo; ya que enseña a las futuras generaciones que en el fondo liderarán el país.
2. Aprecia a sus estudiantes: es cálido, honesto, abierto; respeta a sus estudiantes, se interesa por ellos y disfruta de la interrelación profesor-alumno, logrando que sus estudiantes sientan la comodidad de poder expresarse libremente, fomentando así el diálogo.
3. Es un Guía: sirve de modelo a sus estudiantes en cuanto a su comportamiento como profesor.
En lo Profesional:
1. Domina su materia: ya que se señorea de su ámbito y sabe explicarlo y hacerlo llegar a sus alumnos logrando interés por parte de éstos.
2. Se mantiene actualizado: ya que estudia constantemente, no se queda atrás y utiliza las herramientas que la tecnología pone a su disposición.
3. Tiene conciencia de la responsabilidad de su profesión: ya que formamos personas, que tendrán una responsabilidad en el futuro, con una buena educación logramos que los futuros líderes del país sean gente más capacitada y mejor.
4. Se autoevalúa: tasa el resultado de su tarea y sabe rectificar cuando es necesario.
En
1. Fomenta el aprendizaje significativo: con experiencias propias y de sus estudiantes, fomentando así que el aprendizaje permanezca en el tiempo logrando interesar a la vez a sus estudiantes.
2. Prepara bien su clase: lleva el material adecuado, con las preguntas, etc., no “improvisa”, ya que el costo será de sus estudiantes, logrando así que sea una actividad estimulante y productiva.
3. Logra que los estudiantes se interesen por la materia: muy conectado con los tópicos anteriores, ya que emplea eficientemente estrategias de enseñanza-aprendizaje apropiadas por ejemplo preguntando ¿de dónde viene la costumbre de andar en micro?, así no solo se logrará conectar al estudiante con su realidad actual, sino también interesarlo porque es algo que el conoce y ve a menudo.
4. Evaluación: prepara las pruebas a tiempo, con justicia y de acuerdo a los objetivos y contenidos del curso, estimulando el mejoramiento del aprendizaje.
5. Tomar en cuenta la diversidad de alumnos en la sala de clase: las diferencias económicas, intelectuales, actitudinales etc., que son inherentes en cada educando y si a esto añadimos las diferencias propias de la “moda” por ejemplo las muy en boga tribus urbanas “emos, pokemones, pelolais” harán más característica cada sala de clases a la que estemos destinados, por lo que deben utilizarse diferentes estrategias de aprendizaje para lograr así que la diversidad de cada aula aprenda.
En la responsabilidad:
1. Es juicioso: vale decir, que cumple con las normas mínimas de puntualidad, en lo que compete a impartir la docencia, administración de exámenes, asignación y entrega de calificaciones.
Es así como podemos establecer de una cierta forma que es un buen profesor a mi juicio. Además y para finalizar, también me verificaré como buena docente si al llegar al aula veo a alumnos comprometidos y expectantes con la clase, que participen de esta, que se noten sus ganas y entusiasmo, lo que también me dará ánimo a mí para continuar perfeccionándome y superándome aún más.